Una serie de fotografías captaron el momento en el que un hombre deprimido se ofreció como alimento a un tigre blanco en un zoológico.
Todo sucedió en China, en el zoológico de Chengdu. Ahí, Yang Jinhai, de 27 años, decidió que su vida era tan deprimente que sería más útil para la sociedad siendo comida para los tigres del zoológico.
Les cuento el chisme completo, resulta que el buen Yang se
consiguió chamba como guardia de seguridad, aquello lo puso tan contento
que hasta se puso a mandar mensajes optimistas en las redes sociales,
en los que se decía muy feliz por su nuevo trabajo. Lo malo fue que en poco tiempo Yang
comenzó a sentir que su trabajo era monótono y aburrido (Godinez rules) y buscó otro trabajo. El destino le brindó una
nueva oportunidad oportunidad cuando encontró otra chamba, ahora en una
fábrica, pero tampoco le gustó el
trabajo. Y es que Yang Jinhai sentía que la vida se trataba de algo más y
decidió seguir buscando ser feliz con un trabajo que lo llenara.
Era tanta su depresión que fue a
distraerse al zoológico local, en donde se identificó con los tigres,
pues ellos también eran una criaturas nobles y magnificas, pero que
están encerradas y son incapaces de seguir sus instintos naturales. Por
eso, ante la mirada atónita de los demás visitantes, anunció que
ofrecería su propio cuerpo para que los animales comieran.
Subió al exterior de la jaula en la que habían dos tigres machos y una
hembra, y después entró. Para su mala suerte, los felinos parecían más
espantados que él, entonces, ya un tanto fastidiado de que el destino se
burlara de él, comenzó por hacerles caras y a intimidar a los animales.
Finalmente fue atacado por uno de ellos, aunque demasiado tarde, pues
fue rescatado por uno de los cuidadores del zoológico, quien lo sacó de
la jaula.
Poco después, la familia de nuestro campeón, comentó a la prensa que
Yang llevaba mucho tiempo deprimido y que padecía trastornos mentales,
por lo que recibirá asesoría psiquiátrica para que se relaje un poco.
0 comentarios :
Publicar un comentario